Planteamiento estratégico: El bróker establece tácticas de negociación personalizadas, considerando factores como la capacidad de pago del cliente y su historial financiero.

Intermediación directa: Se lleva a cabo la negociación con las entidades bancarias, buscando mejorar las condiciones ofrecidas inicialmente.

Optimización de términos: El bróker asegura que el cliente obtenga una oferta que maximice ventajas como tasas reducidas, periodos de gracia o eliminación de ciertas comisiones.

Cierre de la negociación: Una vez que se logran las condiciones favorables, se formaliza el acuerdo y se guía al cliente en los siguientes pasos.